Las luces de camino desempeñan luminarias de alumbrado publico un papel importante en la infraestructura de la ciudad, brindando una iluminación que magnifica la visibilidad, la salud y la seguridad, junto con la protección para peatones, automovilistas y comunidades más pequeñas. La valiosa cantidad de luz en el camino reduce los problemas, disuade a los delincuentes y genera condiciones de demanda para las zonas financieras y comerciales. A medida que los lugares buscan mejorar y modernizarse, la demanda de tratamientos de luz económicos y visualmente agradables se ha amplificado. Las actualizaciones electrónicas, junto con la cantidad de luz CONTRIBUIDA, los controles inteligentes y las versiones de eficiencia energética, han revolucionado la forma en que funciona la cantidad de luz del camino, lo que lo convierte en un aspecto clave de la planificación de la ciudad.
Las luces de camino no solo iluminan las entradas de vehículos, sino que brindan una variedad de necesidades que desempeñan un papel en la mejora de la ciudad. Las carreteras bien iluminadas reducen en gran medida los problemas nocturnos al crear visibilidad para los conductores y los peatones. Las zonas bien iluminadas al mismo tiempo disuaden los pasatiempos de los villanos, lo que resulta en condiciones más confiables para los propietarios de viviendas y las pequeñas empresas. Al mismo tiempo, las farolas juegan un papel en las visuales de una comunidad, mejorando un entorno completo y haciendo que los entornos de la población sean preferibles para los clientes y los vecinos por igual.
La cantidad de luz de camino deficiente o mal mantenida genera innumerables problemas, que incluyen tasas de interés criminales amplificadas, actividades de mercado nocturno reducidas y grandes problemas para los clientes. Por esta razón, las autoridades municipales y los organizadores de la ciudad deben priorizar las luces de alta calidad que se alinean con las necesidades especiales de la ciudad y los planes de sostenibilidad.
Hay varios tipos diferentes de luces de camino que están diseñadas para satisfacer diversas áreas y necesidades. Los accesorios de materiales cotidianos que se usan comúnmente incluyen unidades de sodio de alta presión (HPS), unidades de haluro de aleación, luz de inducción y farolas CONSUMIDAS.
Las unidades HPS fueron definitivamente las luces de camino más comunes, pero no tienen una gran eficacia ni una vida útil más larga. Producen un destello amarillo anaranjado, que es útil para describir las entradas de vehículos, pero a menudo distorsiona la percepción de los colores. A pesar de que son energéticamente eficientes en comparación con la tecnología de luz de inducción antigua, han sido reemplazadas gradualmente por accesorios LED, pero no tienen una menor calidad de brillo ni mayores costos de mantenimiento.
Las unidades de haluro de aleación producen un brillo blanco brillante con una representación de colores más eficiente en comparación con las unidades HPS. Se utilizan en áreas donde la uniformidad de los colores es crítica, como las calles comerciales y el almacenamiento de grandes cantidades. Sin embargo, tienen una vida útil de la batería menos larga y un mayor consumo de energía en comparación con las opciones LED, lo que las hace mucho menos útiles en los entornos urbanos modernos.
La luz de inducción es una opción duradera que sigue sin filamentos, lo que elimina las necesidades de mantenimiento. A pesar de que muestran una mayor eficiencia energética en comparación con las unidades HPS y de haluro de aleación, es posible que no hayan alcanzado una adopción frecuente con las actualizaciones ultrarrápidas de los sistemas CONTRIBUTED.
Las farolas CONTRIBUTED han revolucionado la cantidad de luz urbana sin una eficiencia energética de primera clase, una vida útil de la batería más larga y una mayor luminosidad. Estas consumen mucha menos energía en comparación con las luces tradicionales, a pesar de que brindan una iluminación más blanca con una mayor uniformidad de color. Al mismo tiempo, los accesorios CONTRIBUTED son extremadamente duraderos, lo que reduce los costos de mantenimiento y los efectos ecológicos. Innumerables lugares han hecho la transición a la fuente de luz CONTRIBUTED para reducir los costos de energía y mejorar la salud y la seguridad de la población.
La adopción de las farolas CONTRIBUTED ha traído innumerables beneficios a los municipios de todo el mundo. La ventaja más importante es, sin duda, la eficiencia energética. Las farolas CONTRIBUIDAS consumen entre un 50 y un 70 % menos de energía eléctrica que las soluciones de iluminación normales, lo que supone un importante ahorro de dinero para los lugares y los contribuyentes. La reducción del consumo de energía eléctrica también reduce las emisiones de carbono, lo que se traduce en un ahorro de energía respetuoso con el medio ambiente.